Te quería así, como si nada,
sin prisa, sin cuerdas ni lazos,
sin pedir permiso
sin buscar explicación.
Tú pensabas con la razón
y yo...
en vez de salir corriendo
me quedé esperándote
con los dedos cruzados.
Un rincón fuera del mundo desencantado
Cuando apuntas con un dedo, recuerda que los otros tres dedos te señalan a tí.
Si pasas mucho tiempo así los dedos se acaban por deformar, por eso es mejor ir a por las cosas en vez de esperar con los dedos sentados.
ResponderEliminarToda una declaración de amor.
ResponderEliminarBesos.
El amor que siempre nos gana.
ResponderEliminarSaludos ;-)
Genial me gustan los textos cortos fáciles rápidos un abrazo para vos y tu blog
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